Gracias a las denuncias de IMC Toys y al trabajo de Marcas y Patentes Sugrañes, la policía ha retirado los juguetes falsificados.
Madrid, 30 de enero. Los cuerpos de la Policía Nacional y de la Guardia Civil han cerrado dos casos de montaje y comercialización de más de 40.000 unidades de juguetes falsificados en las provincias de Jaén, Madrid y Barcelona. Las investigaciones se iniciaron mediante la denuncia interpuesta por IMC Toys, y gestionada a través de Marcas y Patentes Sugrañes, que había detectado cómo sus productos estaban siendo presuntamente falsificados y puestos a la venta con el consiguiente riesgo de salud para los niños.
Los agentes, junto a los abogados de IMC Toys, llevaron a cabo una inspección en los almacenes en Jaén, detectando miles de juguetes de las marcas más populares, concretamente 7.747 de los Bebés Llorones Lágrimas Mágicas y de los Bebés Llorones. Estos habían sido supuestamente falsificados, incumpliendo las normas más básicas de seguridad que protegen la integridad física de los receptores, en este caso de los niños.
Cajas de juguetes intervenidos (Guardia Civil)
La operación de Barcelona se llevó a cabo el pasado 15 de enero en un local comercial en la Calle Juli i Galve Brusson y su almacén en la Calle Industria, ubicado en un polígono industrial de Badalona. Allí se procedió a la intervención de 32.930 juguetes falsificados de varias marcas, valorados en 391.676 euros. Además, la operación se saldó con una persona investigada por la presunta comisión de un delito contra la propiedad industrial.
Muñecos falsificados de Cry Babies (Guardia Civil)
Los productos intervenidos no habían pasado los controles de calidad y seguridad que establece la Unión Europea y distaban mucho de los originales en cuanto a la calidad de los materiales y su fabricación.
IMC Toys, al igual que la Policía, alerta del alto riesgo que este tipo de productos falsos representa para la salud y la seguridad de los niños. Al estar producidos fuera de los canales legales no se encuentran sometidos a la normativa ISO de calidad, por lo que en su fabricación presuntamente se emplean materiales, pinturas y barnices nocivos para la salud.
Además, supuestamente estos productos se producen en fábricas clandestinas con deficientes condiciones higiénicas y falta de respeto hacia los derechos humanos y de los trabajadores.
IMC Toys vela por la calidad y distribución segura de sus productos, que pasan por estrictos controles de la UE. Según un estudio realizado por la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO) las pérdidas por falsificación de juegos y juguetes representan el 16,6% de la facturación anual de las empresas jugueteras españolas.